lunes, mayo 16, 2005

El Quijote apócrifo

Si nos referimos a las letras, este año es el de... El Quijote! Mi forma de celebrar tan magno acontecimiento es echando mano de lo que sin duda, para mi fue todo un descubrimiento, hace ya unos seis años mientras hacía un trabajo sobre el bibliógrafo aragonés Latassa: resulta que en 1614 mientras Cervantes estaba escribiendo el segundo volumen del Quijote y tras un estupendo éxito con el primer volumen, un tal "Licenciado Alonso Fernández de Avellaneda" publicó, adelantándose a Cervantes, el segundo volumen (se imprimió en Tarragona en 1614). En fin la que se montó fue pequeña, porque tan pronto como el público leyó esta obra se vió que por ahí no se había paseado la mano de Cervantes ni con una pluma ni nada por el estilo. Por supuesto, Alonso Fernández de Avellaneda era un seudónimo pero lo que sí se supo era que el autor era aragonés (!!). Cuando Cervantes terminó el primer volumen éste avanzaba que El Quijote pasaría por tierras aragonesas, y el avispado Fernández de Avellaneda aprovechando que el Ebro pasaba por Zaragoza, dijo: "esta es la mía", publicando el consabido volumen; ¿y qué hizo entonces Cervantes ante tamaña ofrenta?, lo normal: canceló la visita del Quijote por nuestra región. Le salieron otros bolos y la gira se torció... Pues eso que como aragonesa la historia me tocó y me resultó tan curiosa e interesante... Sobre todo porque sigue sin saberse a ciencia cierta quién se escondió tras el seudónimo de Avellaneda. En una bio-bliografía de finales de siglo XIX también publicada en Zaragoza sobre escritores aragoneses se habla extensamente de este yotirolapiedraymescondo-autor. Es un artículo digno de leer.